Las OMP hacemos una propuesta formativa misionera, especialmente dirigida a jóvenes, para trabajarla individualmente y también en grupo. Partimos del convencimiento que “la fe se fortalece dándola” (RMi 7) y que es necesario un compromiso permanente para mantener siempre vivo el espíritu misionero y tener siempre la “la dulce y confortadora alegría de evangelizar” (EN 80).