La situación de pandemia que vivimos obliga a todos a no salir de casa, pero no quita que se puedan tener muchas iniciativas misioneras. Los jóvenes son especialmente creativos en eso.

“Aunque el mundo del sufrimiento exista en la dispersión, al mismo tiempo contiene en sí un singular desafío a la comunión y la solidaridad” decía san Juan Pablo II en la carta Salvifici doloris (n. 8) que escribió después del atentado que sufrió. La actual crisis del coronavirus está evidenciando la verdad que hay detrás de esta afirmación de san Juan Pablo II. De hecho, el Cardenal Tagle, Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos y presidente de Caritas Internationalis, plantea ¿qué lugar tiene la caridad en nuestro tiempo marcado por la pandemia del coronavirus? y en su reflexión sobre esta cuestión insta a superar el virus y el miedo con un “contagio pandémico de amor”. También la Delegación de misiones de Canarias invitaba a tener una actitud misionera ante la crisis por Twitter: “Como misioneros debemos ser una luz de esperanza en medio de toda esta inquietud y miedo que se vive en todo el mundo”. En este sentido se han multiplicado las iniciativas de oración, de comunión y de solidaridad protagonizadas por los jóvenes, como algunas de las que presentamos; como dice el Papa: “Los jóvenes son capaces de crear nuevas formas de misión, en los ámbitos más diversos” (Christus vivit, 241).

Los misioneros laicos vicencianos (Misevi) convocaron a la oración con toda la Familia Vicenciana y constataban que “estar en casa no es estar solos. Pudimos estar unidos desde la distancia. Gracias por ese momento tan especial”. Los jóvenes de San Juan de Dios ofrecen en su capilla hospitalaria virtual una propuesta para orar y contemplar con las estaciones del Via Crucis ante la situación de emergencia sanitaria que vivimos; una propuesta para orar desde casa y estar unidos espiritualmente. Los Jóvenes Dehonianos proponen #CuaresMásTÚ con materiales para celebrar el tiempo de cuaresma y pascua como un tiempo que marque la vida, un tiempo especial deje huella.

Como iniciativa solidaria ha organizado la delegación de Sevilla de la Asociación Solidaridad una campaña para recoger máscaras de buceo para elaborar aparatos de respiración. Por su parte, PROYDE Andalucía ha lanzado un minijuego para los más pequeños en el que expone la acción social de La Salle durante el estado de alarma por el #Covid_19 con las personas más vulnerables. Una de ellas es la confección de mascarillas para el personal sanitario que han hecho los voluntarios; otra es la promoción del comercio justo a través de su página web.

Misiones Salesianas informa que en el Centro Don Bosco de Gagillapur (India) se han fabricado 1.000 mascarillas para proteger a los más vulnerables frente a la pandemia como solidaridad con los países que sufren la pandemia. Por eso piden ayuda para poder traer a España mascarillas FPP2 para ayudar al personal sanitario a seguir luchando contra el coronavirus: “Una pequeña aportación contribuirá a cambiar nuestro futuro”. También en el asentamiento de refugiados de Palabek la Escuela Técnica Don Bosco prepara mascarillas para luchar contra el coronavirus en Uganda. La Red Don Bosco que coordina nueve de las más importantes ONG’s salesianas ha iniciado un trabajo de coordinación mundial de la respuesta de los Salesianos a la emergencia por COVID-19. “Nos sentimos muy cerca de España… sabemos lo que es estar en cuarentena, el miedo a salir a la calle, ver morir a gente”, dice el misionero salesiano P. Jorge Crisafulli del Don Bosco Fambul en Freetown, la capital de Sierra Leona. La obra que dirige está preparada para la llegada de la pandemia con la experiencia de haber superado el ébola sin haber dejado de atender a los menores más necesitados.

El estado de alarma ha hecho necesario recurrir a las tecnologías de la comunicación para poder reunirse. Así tampoco se paran las actividades de animación y formación misionera. En la Delegación de misiones de Navarra se han reunido para organizar la animación misionera en Navarra. “Ante las dificultades: ilusión, ingenio, fe y esperanza. Todo ello en comunión con nuestros misioneros”. Además, al tener que cancelar el primer encuentro de formación que iban a tener para el voluntariado de verano, han creado una revista formativa para los interesados en formarse para la misión para aprovechar el tiempo de confinamiento.

Como, además, está muy próxima la Pascua y no podrán tener lugar las tradicionales pascuas juveniles, Juventudes Marianas Vicencianas ha propuesto a sus miembros celebrarla juntos de una manera diferente: JMV ha organizado una Pascua en streaming. Para participar piden a los jóvenes que se ofrezcan para las lecturas de las celebraciones, que envíen por email su testimonio de fe en vídeo, fotos de otras pascuas vividas juntos, clips sobre el amor fraterno, etc. También Mies Juvenil ha publicado los horarios de los oficios de Semana Santa en el centro MIES que se retransmitirán en directo a través de la página web y el Facebook oficial de MIES para que todos puedan participar.

El espíritu misionero es imparable, como se ha constatado en múltiples ocasiones en los misioneros y misioneras que se quedan junto a la gente en los momentos más terribles. Es el espíritu que es necesario para vivir estos momentos de pandemia desde la solidaridad con los más necesitados. La actitud de los jóvenes que con sus iniciativas buscan ser creativos para orar y estar cerca de todos, es una luz que llena de esperanza estos momentos de dolor.