Pier Luigi Maccalli, misionero secuestrado en el Sahel: «incluso con cadenas era misionero».
- On 21 de octubre de 2022
La noche del 17 de septiembre de 2018 permanecerá en la retina del Padre Pier Luigi Maccalli, cuando fue secuestrado por radicales islámicos en Bomoanga (Níger) durante dos años, hasta el 8 de octubre de 2020, tras ser liberado en Mali.
Durante su secuestro estuvo rezando todos los días con un rosario improvisado y resaltó que esta oración fue siempre su compañía: «Hice un rosario con un paño que me cubría la cabeza del sol, y todos los días le rezaba a Nuestra Señora Desatanudos, encomendándole este gran nudo y pidiéndole que intercediera por mi liberación, por mi familia, por mi comunidad y por la paz en el mundo». Un mes después de su secuestro, el sacerdote fue trasladado a Burkina Faso. Fue el momento más difícil que vivió durante su cautiverio: «Ese día llegamos a una cueva y allí me esposaron a un árbol. Fue un momento muy incómodo. Lloré. Clamé a Dios».
A pesar de los momentos difíciles que atravesó durante los dos años del secuestro, el P. Maccali mantiene la esperanza de que la persecución de los cristianos en África traiga frutos de paz y libertad al continente en el futuro: «Estoy convencido de que este momento difícil para mí, para mi comunidad y para las comunidades africanas que viven en este tiempo de terrorismo traerá frutos de paz, frutos de libertad, frutos de vida nueva y quizás de nueva conciencia en tantas comunidades probadas».
Ahora el padre Maccalli es condecorado en la primera edición de los premios misioneros Beata Pauile Jaricot y Beato Paolo Manna.